Dentro del área de gestión Obligaciones Generales del Estado, se encuentran, por ejemplo: las partidas de devolución del Impuesto al Valor Agregado (IVA) a los exportadores y del Impuesto sobre la Renta (ISR), subsidios, subvenciones y otros compromisos del Gobierno salvadoreño.
“Precisamente estamos trabajando en esas modificaciones. Estamos identificando de dónde vamos a disminuir esa cantidad que la Asamblea aprobó reorientar, pero todavía no tenemos identificado de dónde vamos a reducir”, confirmó ayer Carlos Gustavo Salazar, director general del Presupuesto.
El miércoles pasado, cuando la Asamblea aprobó el presupuesto de 2017, se acordó que el ramo de Hacienda reduciría $19 millones de su total asignado inicialmente, que era $89 millones.
El año pasado, esta área de gestión tenía presupuestado $27 millones para las Obligaciones Generales del Estado. Es decir, que este 2017 se aumentó en $62 millones.
Salazar espera que “a más tardar el jueves ya vamos a tener identificado de dónde le vamos a rebajar al presupuesto para cubrir las reorientaciones que se han planteado”.
Sin embargo la falta de definición para el recorte en el presupuesto no sería ilegal. El director explicó que la Asamblea Legislativa emite un dictamen de donde se tiene que recortar, y a partir de esto Hacienda evalúa las partidas que más se ajusten. Aun así, hay asignaciones que no permiten ser disminuidas de su monto inicial, como las contribuciones a organismos internacionales.
Las que sí podrían ser modificadas, agregó Salazar, son “la provisión que tenemos para la devolución del IVA a los exportadores o para devolver el impuesto sobre la renta. Básicamente por allí andaría”, agregó.
Cuestionan falta de claridad
Al respecto, Carlos Pérez, asesor de la Fundación Nacional para el Desarrollo (Funde), manifestó que la no claridad en cuáles partidas se tendrán que ajustar en el presupuesto refleja una falta de coordinación entre los técnicos que trabajan directamente para el ministro de Hacienda, Carlos Cáceres, con la dirección de presupuesto.
“Estas líneas de trabajo están subevaluadas porque allí están las partidas que tanto se han cuestionado, que no están con su valor total. Con quitarle $19 millones a las devoluciones de IVA o renta no estarían cayendo en una práctica más extrema de lo que han hecho en años anteriores”, comentó.
Ricardo Castaneda, economista investigador del Instituto Centroamericano de Estudios Fiscales (ICEFI), coincidió en que estos rubros históricamente han sido subestimados, y esto ha provocado el incremento de la deuda a través del uso de las Letras del Tesoro (LETES).
“Es preocupante e irresponsable que se hayan aprobado recortes sin que se tuviera certeza. Refleja que el presupuesto 2017 solo intenta administrar la escasez de un Estado atado de manos y pies”, dijo.
Para el analista económico, Luis Membreño, esta situación comprueba que “el Gobierno ve de dónde reduce sabiendo que tiene compromisos, pero después va a buscar cómo los rellena para poder hacerle frente a los compromisos”.
¿Qué no se incluyó?
Deuda
No contempla todos los fondos necesarios para pagar el servicio de la deuda previsional. La partida se abrió solo con $1,000, cuando se estima que se necesitan $221 millones.
Pensiones
El Ministerio de Hacienda sólo asignó, este 2017, $1,000 al pago de las pensiones del Instituto de Previsión Social de la Fuerza Armada (IPSFA), cuando se requieren al menos $50 millones.
Recorte
La Asamblea Legislativa recortó el presupuesto para las Obligaciones Financieras del Estado, de Hacienda, donde se incluyen rubros como las devoluciones de impuestos.
Ajuste
Se recortaron $2 millones a la Corte Suprema de Justicia (CSJ), y $1 millón a la Corte de Cuentas de la República (CCR), para distribuirlo en Organizaciones No Gubernamentales (ONG).
$19 millones
La Asamblea Legislativa aprobó que el Ministerio de Hacienda redujera en su presupuesto de 2017 un monto de $19 millones.
$89 millones
Había presupuestado Hacienda para cumplir con las Obligaciones Generales del Estado, en 2016 fue de $27 millones.